En nuestra Institución, creemos firmemente que el arte y la cultura son pilares esenciales para la transformación social y educativa. Por eso, fortalecer los lazos con la comunidad y abrir espacios de creación colectiva ha sido siempre uno de nuestros grandes propósitos.
Este año, desde el Programa Licenciatura en Educación Artística y Cultural de nuestro Campus Álvaro Ulcué Chocué, a cargo del Coordinador Julián David González, participamos en la primera edición de la bienal liderada por el Colectivo CaminArte, un proyecto que nació a partir del sueño de artistas quilichagueños quienes imaginaron un festival permanente para dinamizar la vida cultural del municipio.
Gracias a su invitación, pudimos articularnos desde lo pedagógico y creativo, tejiendo redes con colectivos como Metamorfo, Cubo Rojo, Casa Arte y variedad de artistas del norte del Cauca, para consolidar un circuito que contribuya al fortalecimiento cultural de la región.
Así pues, del pasado 13 al 20 de abril, participamos en la bienal que no solo dejó huella por la calidad de las obras y presentaciones, sino también por el eco que generó en la comunidad, pues hubo una voz a voz que celebró la existencia de nuevos espacios que resignifican el territorio y demuestran que Santander de Quilichao es mucho más que los estigmas que lo han marcado.
Para nuestra comunidad educativa, la experiencia fue enriquecedora ya que contamos con la participación activa de estudiantes, incluso en temporada de receso. Además, la puesta en escena de la obra La Vorágine —dirigida por nuestro Docente Mario Benavides y protagonizada por estudiantes de LEAC— tuvo tan buena acogida que fue invitada a otros espacios culturales, ampliando su impacto más allá de este encuentro.
Cabe destacar que a pesar de los desafíos, como mantener la constancia de estos espacios y fortalecer la relación entre la academia y la comunidad, la excelente recepción de este evento nos impulsa a seguir creyendo en esta red de colaboración viva y activa, que se proyecta hacia el futuro.
Desde la Fundación Universitaria de Popayán, buscamos convertir este encuentro en un proceso permanente que, a través de talleres, exhibiciones y actividades continuas, acerque a nuestros estudiantes y a la comunidad en general al arte y a la cultura.
Ser parte de CaminArte ha sido un recordatorio de que el arte nos conecta, nos moviliza y nos da nuevas formas de pensar y sentir. Por ello, seguimos apoyando estas iniciativas que hacen de la educación un proceso integral y transformador, convencidos de que el arte es, y seguirá siendo, un motor vital para la construcción de un territorio más humano y consciente.
Todas las fotografías fueron suministradas por el Colectivo CaminArte
